Durante los últimos años, la madera clara —en tonos como el roble nórdico, el abedul o el pino— ha sido la gran protagonista de la decoración de interiores. Su estética minimalista, fresca y natural conquistó salones, cocinas y dormitorios bajo el influjo del estilo escandinavo. Pero las tendencias cambian, y muchos se preguntan: ¿estamos ante el fin de la madera clara en casa?
De lo nórdico a lo cálido: el cambio de tendencia
La pandemia marcó un antes y un después en la forma de vivir el hogar. Pasamos más tiempo dentro de casa y buscamos espacios más acogedores, con alma y carácter. Esto ha impulsado un giro hacia maderas más oscuras y tonalidades cálidas, como el nogal, el cerezo o el roble ahumado.
Las revistas de interiorismo y los diseñadores coinciden: vuelve la madera con presencia, la que aporta profundidad y elegancia, y se combina con textiles naturales, metales dorados y paredes en tonos tierra.
Por qué la madera clara pierde protagonismo
Aunque sigue siendo versátil y atemporal, la madera clara está cediendo espacio a opciones más intensas por varios motivos:
- Búsqueda de contraste: los interiores completamente blancos o beige comienzan a verse fríos y sin personalidad. Las maderas oscuras aportan contraste visual y sensación de lujo.
- Tendencia hacia lo natural y artesanal: las texturas más marcadas, los acabados mate y los tonos envejecidos transmiten autenticidad.
- Influencia del diseño clásico renovado: el “new vintage” y el estilo mid-century modern recuperan maderas profundas y vetas visibles.
- Mayor durabilidad visual: los tonos oscuros disimulan mejor el desgaste y las marcas del tiempo.
Cómo combinar maderas oscuras sin recargar el ambiente
Si estás pensando en actualizar tu casa, pero temes que la madera oscura reduzca la sensación de luz o amplitud, hay soluciones sencillas:
- Equilibra con paredes claras y buena iluminación. Las lámparas cálidas o la luz natural suavizan el efecto visual.
- Introduce contrastes con tejidos suaves (lino, algodón, lana) en colores arena, crema o gris perla.
- Juega con el metal y la piedra. Los detalles en latón, mármol o cerámica clara aportan sofisticación.
- Combina tonos de madera. Un suelo oscuro con muebles más claros (o viceversa) crea dinamismo sin saturar.
Pero… ¿es realmente el fin de la madera clara?
No del todo. Aunque las maderas oscuras ganan terreno, la madera clara sigue siendo un básico del diseño contemporáneo. Su ventaja está en su capacidad para adaptarse: combina con estilos minimalistas, nórdicos, mediterráneos o japandi.
Más que un “fin”, podríamos hablar de una evolución hacia el equilibrio. Las tendencias actuales apuestan por mezclar tonos, texturas y acabados, logrando espacios más naturales y personalizados. En lugar de seguir modas estrictas, el objetivo es crear ambientes que reflejen la identidad de quien los habita.
Conclusión: de la moda al equilibrio
La decoración ya no se guía por un único estilo dominante, sino por la búsqueda de armonía. La madera clara no desaparece, se reinventa. Convive con tonos más oscuros, con materiales reciclados, con metales cálidos y con una nueva mirada hacia la sostenibilidad.
En definitiva, no asistimos al fin de la madera clara, sino al inicio de una nueva etapa en la que la diversidad, la mezcla y la autenticidad son los verdaderos protagonistas del hogar.